📖 «Estudia para presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de la verdad.» – 2 Timoteo 2:15
El estudio de la teología no es solo una carrera académica, es una búsqueda profunda de la verdad divina. La teología nos invita a conocer a Dios, no solo a través de lo que otros nos han enseñado, sino a través de una comprensión personal y directa. Así como el hijo pródigo se aleja de su hogar, muchas veces nos alejamos de Dios, pero el estudio de su palabra puede ser el camino de regreso, un medio para restaurar la conexión con nuestro Creador.
A veces, cuando decidimos estudiar teología, no es solo por un llamado ministerial, sino también como un deseo profundo de conocer mejor a Dios, entender sus caminos y reflejar su voluntad en nuestro diario vivir. A través de los estudios, nos preparamos para no solo hablar de Dios, sino para vivir de acuerdo a sus enseñanzas.
El proceso de aprender más sobre Él puede ser desafiante y, a veces, parece que estamos lejos de casa. Pero al igual que el Padre del hijo pródigo, Dios nos espera, siempre dispuesto a guiarnos hacia una comprensión más profunda y hacia su abrazo amoroso.
Regresa al camino del conocimiento y la sabiduría divina, y permite que tu corazón se acerque a Él.
- Recuerda que el estudio teológico no solo busca conocimiento, sino también transformación espiritual.
- La verdadera sabiduría proviene de Dios, y el estudio de su palabra te ayuda a vivir conforme a su voluntad.
- Ora por claridad, discernimiento y una fe más profunda mientras estudias.
- El conocimiento debe llevarte a la acción: que tu aprendizaje se refleje en tu vida y en el servicio a los demás.
Para orar: Señor, te doy gracias por la oportunidad de estudiar tu palabra. Te pido sabiduría y entendimiento para conocer tu verdad y aplicar tus enseñanzas en mi vida. Que todo lo que aprenda me acerque más a ti, y me permita ser un instrumento de tu amor y tu paz. En el nombre de Jesús, amén. 🙏